Luiyo Vázquez, el arte de la arquitectura

Argentina es un país con una gran tradición en el mundo de la arquitectura, y con tan elevado número de destacados ciudadanos argentinos trabajando aquí en España, su aportación al diseño urbano es algo de lo que Marbella también se ha beneficiado. Entre los profesionales que han contribuido a diseñar Marbella y definir su identidad ligada al lujo y el bienestar, está Luiyo Vázquez, un arquitecto con ojo artístico, nacido en Buenos Aires.

Interesado tanto en el arte como en la arquitectura desde temprana edad, Luiyo es un profesional que integra ambas disciplinas con una armonía natural. En lugar de especializarse en el aspecto más vinculado a la ingeniería y construcción, pronto se especializó en diseño convirtiéndose en un experto en dibujo arquitectónico. Sus habilidades técnicas, junto con un ojo para el detalle estético, hacen que sea no solo una prolífica fuente de ideas conceptuales y de estilismo, sino también un especialista capaz de representar los diseños de otros arquitectos a la perfección.

Los años del boom inmobiliario en Marbella le proporcionaron un mercado receptivo y favorable donde desarrollar su trabajo, convirtiéndose en un profesional muy solicitado, tanto como ilustrador como arquitecto por derecho propio. Como resultado, sus características perspectivas de nuevas promociones, proyectos urbanos y villas se hicieron muy famosas y reconocidas tanto en Marbella como en otros lugares, consolidando una reputación que no ha disminuido durante la época de la desaceleración de la construcción.

El proceso creativo

Producto de las afamadas escuelas de arquitectura de la Argentina, Luiyo es técnico y creativo a la vez, aunque más a favor de esto último. “Siempre fui alguien que se expresa a sí mismo sobre el papel,” dice Luiyo, “incorporo y utilizo la tecnología moderna con más entusiasmo del que puedas imaginar, pero realmente mis mejores ideas cobran vida con un lápiz y un bloc de notas en mis manos.”

En una era en la que demasiados arquitectos se han vuelto “perezosos” y han sacrificado la creatividad y la personalización para adaptarlas a la conveniencia de las plantillas diseñadas por Autocad, aquí tienen a un arquitecto que utiliza las máquinas y la tecnología para lo que fueron creadas en un principio: la formalización y presentación de las ideas y conceptos de diseño a los que llega sobre el papel.

“Creo que el ordenador es una herramienta excelente, pero no idealmente adaptada al proceso de diseño creativo, ya que te obliga a trabajar en un marco predefinido, ejecutando una serie de funciones para componer un diseño partiendo de un número de elementos razonablemente amplio, pero aún así limitado. Es como montar la maqueta de un coche, el proceso hace que fijes tu atención en la parte mecánica del ejercicio, no en la creativa.”

La etapa conceptual del proyecto es donde se perfila la verdadera esencia del diseño, por eso Luiyo prefiere que las ideas se formen y evolucionen a medida que plasma sobre el papel lo que visualiza en su mente. “En vez que limitar tus posibilidades, este proceso te ayuda a expandir, evaluar y desarrollar las 3 dimensiones del espacio en tu mente. Al menos en mi caso, este proceso estimula mi creatividad dándole libertad de expresión, y provoca una actitud inicial de ensayo y error que conduce a ideas de diseño mejor concebidas.”

Como resultado, sus diseños no son solo menos rectangulares e inertes que los típicos producidos en Autocad, sino también más variados, individualizados y flexibles que los trabajos que salen de una impresora de Autocad, generalmente mucho más rígidos e uniformados.

Una perspectiva romántica

Perfeccionando una habilidad que hoy en día muchos arquitectos han perdido ó como mínimo descuidado, Luiyo ha desarrollado una especialización profesional muy demandada, “Gran parte de mi trabajo a lo largo de los años ha sido por encargo de arquitectos en vez del usuario final, así que los comentarios y opiniones profesionales con diferentes puntos de vista también han jugado un papel importante en mantener vivo el concepto de diseño y creatividad, y han evitado que me estancase en mis propios métodos.”

Cuando recibe el encargo de crear ilustraciones y perspectivas arquitectónicas de nuevos proyectos, comienza con dibujos técnicos que reflejan las características visuales, dimensiones y proporciones del proyecto en cuestión hasta el último detalle. Después escanea el dibujo y lo amplía, empleando además una combinación de pinturas, acuarelas, lápices y Photoshop para aportar color además de añadir texturas y pequeños detalles como sombras, profundidad y degradados de color en el cielo que sugieren la orientación del edificio.

“Aunque son dibujos técnicos y funcionales también juegan un papel importante como herramientas de marketing para promocionar un proyecto, así que no se trata tan solo de representar todos los detalles con precisión sino también hacer que cobre vida.”

Incluso cuando no está trabajando por encargo para crear nuevos diseños ó perspectivas, Luiyo suele tomar lápiz y papel para plasmar una escena urbana. “Los estilos dependen del medio que utilice, pero mi favorito es un simple lápiz de grafito sobre papel blanco, y representar una escena ó un complejo paisaje urbano con el menor número de líneas posible, es un gran reto.” Una pasión que encuentra su máxima expresión en la pintura abstracta, capturar el detalle, entramado y ambiente de una concurrida calle de Buenos Aires, una vista de Lisboa ó una tranquila plaza de un pueblo en España, constituye una forma de expresión artística y fuente de inspiración para ideas de diseño.

“Cuando me encuentro dibujando de esta manera, luchando por captar el detalle y el ambiente del lugar de la manera adecuada, empiezo a formar parte de la escena que dibujo, y con ello se convierte en un estudio minucioso de muchos estilos arquitectónicos y escenas urbanas de todas las ciudades del mundo que he sometido a escrutinio mientras las dibujaba.” Su habilidad para apreciar tanto el detalle individual como el funcionamiento global de un entorno urbano está siendo implementada en la práctica en un creciente número de proyectos urbanísticos en los que Luiyo colabora en la actualidad.

“Una vez más, la posibilidad de visitar un lugar, pasearse por él, asimilarlo y esbozar ideas me ha sido de gran utilidad al realizar este tipo de trabajo, y contribuir a proyectos de urbanismo en lugares como Ronda, que son algunos de los trabajos más gratificantes que he realizado hasta la fecha.” Combinando el alma de un artista con la de un arquitecto, Luiyo Vázquez aporta una perspectiva romántica que es bienvenida en un mundillo profesional a menudo dominado por los egos y pretensiones.

Diana Morales, 22 Oct 2012 - Noticias