Crecimiento sostenible en el segmento de lujo del Triángulo de Oro de Marbella

pia
Pia Arrieta DM Properties
2 minutos de lectura

Esperamos encontrar lujo en un lugar como Marbella y deseamos que disponga de sostenibilidad. La pregunta es: ¿son ambos conceptos mutuamente excluyentes?, ¿o pueden existir en armonía? La segunda de las respuestas es afirmativa. Ofrecer la mejor calidad del turismo residencial no sólo es compatible con el desarrollo sostenible, sino que la promueve. Una de las ventajas del segmento de lujo, y por lo tanto, en especial consideración, el del Triángulo de Oro de Marbella (Benahavís, Estepona and Marbella), es que promueve la calidad.

Villa en el Triangulo de Oro de Marbella

La calidad en el emplazamiento, en el diseño estético, en su concepto, el acabado y las comodidades produce el desarrollo residencial de calidad, y esto, con sus construcciones de poca altura, excelentes infraestructuras y un mayor valor añadido garantiza un uso mucho más sensible y sostenible de los recursos naturales que el turismo de masas. Exactamente estos factores son considerados algunos de los activos más importantes de nuestra zona y la convierte en una empresa líder en el segmento de lujo. Lo que provoca que la gente no solo venga a Marbella, Estepona y Benahavís por el lujo.

Como se puede apreciar, el lujo es algo más que casas impresionantes, materiales y prestaciones lujosas. Se trata también de espacio, vistas inspiradoras, así como disfrutar de parajes rodeados de naturaleza y vegetación. Por este motivo, las personas se sienten atraídas por estos municipios y la belleza de su entorno natural.

Esta belleza es un bien vital que necesitamos proteger especialmente en el sector inmobiliario. Tenemos que incorporarlo no solo dentro de nuestro concepto de lujo, sino también en la forma en que presentamos nuestra oferta única y los servicios que se le atribuye.

¿Cuándo es sostenible el turismo residencial de lujo? Cuando se basa en la calidad y apenas utiliza recursos, incorporando un buen diseño que se adapta, a la vez que utiliza, la belleza natural de Marbella. Cuando lo hecho por el hombre aporta valor añadido a la la naturaleza que ha heredado es cuando el turismo residencial de alta gama verdaderamente puede llamarse sostenible.

En otras palabras: no es lo que se hace, sino la forma de hacerlo.

Pia Arrieta, 14 Jul 2014 - Informes

Artículos relacionados

Contactar